etapa inexistent

Estamos en Chamonix recién llegados.

La visita a la Maison de la Montagne o Casa de los guías en Chamonix es super interesante, poseen una extensa biblioteca con toda clase de libros, archivos, documentos y manuscritos de reseñas específicas para estudiar, consultar y anotar antes de emprender cualquier actividad en el macizo. Randonees, escaladas, ascensiones, vías abiertas, refugios, mapas, indicaciones técnicas, dificultades, señalizaciones, etc. La sala está abarrotada de personas, mayormente chicos que parecen armarios, con unas pintas terroríficas consultando, anotando, comentando y decidiendo que y como “atacarán” sus objetivos. Una maqueta enorme del macizo preside la sala, curioseamos, preguntamos y confirmamos que el tiempo que se avecina no será precisamente de playa. Paciencia y resignación.

Son casi las siete, hora de cenar, nos dirigimos a la Gite para preparar las mochilas y dejar en los coches todo lo que no nos hará falta durante los próximos 10 días. Cenamos crema de verduras de “verdad”, riquísima, carne en salsa, queso y fruta. Nos vamos a dormir pronto, mañana toca levantarse a las 6,30 de la mañana para empezar la aventura.

Primera etapa prevista Las Houches-Ref. Miage.

Amanece el día completamente tapado, lluvioso, la niebla no nos permite ver ninguna de las montañas que nos rodean. Primer contratiempo y primer fallo producto de la inexperiencia. No nos atrevemos a iniciar la etapa por miedo a la niebla, desconocemos la calidad, cantidad de señalizaciones que indican el camino y tememos perdernos así, la previsión auguraba nieve a partir de los 2000 metros y la ruta superaba esta altura, así que decidimos intentar llegar al refugio de Miage, que teníamos reservado, por otras vías. O sea, tren, bus y acercarnos a patita desde Les Contamines, población más cercana.

Comprobamos desde el segundo día que:

La niebla, las nubes y la llovizna no nos deben arredrar. El TMB puede hacerse y se hace sin ningún problema.

Hubiéramos debido salir desde Les Houches dejando un coche en el aparcamiento del teleférico de Bellevue y desde allí, al pie del glaciar de Bionasay cruzar por el puente colgante que salva las aguas que de él bajan,

ver el puente sobre el rio

subir por el largo, empinado y sinuoso camino hacia el Col de Tricot,

El glaciar de Bionnasay y el col de Tricot

(final del glaciar de Bionnasay e inicio del rio, aguas turbulentas que bajan del deshielo, al fondo el Col de Tricot)

una vez superado se puede divisar la aldea de Miage y muy cerca el refugio anhelado…

Bien, esta es la etapa que no hicimos y nos perdimos porque nos rajamos… ¿una pena no? Por la noche nos encontramos en el refugio con los valencianets que si se atrevieron y nos aseguraron que dificultad: cero. Puñalada trapera.

Luego sigo y explico lo que hicimos en realidad.